Casi 9 de cada 10 chicos de escuelas rurales no alcanzaron resultados satisfactorios
En comparación con la pre-pandemia, la cantidad de alumnos con el menor rendimiento creció 12 puntos.
Los resultados de las pruebas Aprender en las escuelas secundarias de San Luis permiten tener un panorama sobre las consecuencias que dejó la pandemia de Coronavirus. Pero además, exhiben aún más las diferencias entre las escuelas urbanas y rurales.
El informe de las evaluaciones realizadas en 2022 expuso un notable retroceso en el aprendizaje, principalmente en matemáticas. Esto quedó más en evidencia en los chicos que tienen clases en la ruralidad.
Un dato que refleja esto es que casi nueve de cada 10 alumnos del secundario, no lograron los conocimientos esperados en la materia. Es decir, se enmarcaron en los niveles “básico” o “por debajo” de eso.
En las evaluaciones realizadas en octubre de 2022, ningún estudiante fue calificado con “avanzado” y el 11% alcanzó un resultado “satisfactorio”.
Del 89% restante, el 28,4% demostró aprendizajes “básicos” en matemática y el 60,6% “por debajo del nivel básico”.
Si comparamos esos datos a 2019 (previo a la pandemia), siempre centrados en la ruralidad, podemos concluir que creció la cantidad de chicos sin los conocimientos esperados.
Por ejemplo, en tres años la proporción de alumnos en un nivel por debajo del básico pasó del 47,8% al 60,6%.
Pero se redujeron los otros tres segmentos. Los que tenían conocimientos básicos fueron del 31,4% al 48,4%; los calificados como satisfactorios de 19,9% a 11% y los avanzados pasaron de 0,9% a 0%.
Otra es la realidad de las escuelas urbanas donde en 2022 el 52,8% exhibió aprendizajes por debajo del nivel básico, el 32,8% básicos, el 14,3% satisfactorios y el 0,1% avanzados.
En lengua, la diferencia entre los alumnos del ámbito rural y urbano es de cuatro puntos.
En los establecimientos rurales, el 52,7% logró un nivel satisfactorio o avanzado. En los urbanos, la cantidad llegó al 56,7%.